Regálate rosas… regálate a ti misma sin intermediarios, cuando te apetezca, en cualquier instante. Siempre es buen momento aunque sean rosas imaginarias que alegren tu corazón con los colores de tu espíritu. No te niegues a buscar todo aquello que pronuncias con satisfacción en el exterior; en ti misma, dentro de ese mundo que solamente tú conoces. Cántate esas canciones que te despiertan nuevas ilusiones, aprende a distinguir cual gaviota en el aire, la brillantez del universo que converge con tu universo interior, generando esa blanca y poderosa energía que te lleva a una nueva vida. Vuela… surca el aire con tus brazos abiertos al alba... ríe, sueña, baila, conversa contigo y comienza a experimentar los cambios que solo tú puedes lograr. Autora: laisabi Sol